lunes, 28 de diciembre de 2009

La lluvia

Llueve una y otra vez sobre los tejados. Llueve sobre el asfalto, sobre el cercado y los olivos; llueve sobre el río y sólo se oye la lluvia. La gente está encerrada en sus casas y las gotas golpean los cristales empañados. Estoy junto a la chimenea y oigo el agua que cae por el canalón. Algo, sin embargo, me empuja a calzarme las botas y a ponerme el chubasquero. Me abrocho la cremallera hasta arriba, me coloco la capucha y salgo a la calle. La lluvia es fría pero no me detengo. Camino por las cañadas del pueblo hasta salir a la carretera. El agua corre cuesta abajo sin nada que se lo impida y yo sigo su camino. Dejo atrás las casas del pueblo, el teleclub derruido y la parada del autobús. Camino con paso firme hasta el puente y me asomo sobre su ojo. El río agradece la lluvia y sus aguas se ven azules y cristalinas. Doy la vuelta y me fijo en las cunetas llenas de agua, que parecen arroyuelos. Subo la cuesta y atravieso toda la alquería. Junto a la iglesia me detengo. Miro a mi alrededor. No hay nadie. Sigo caminando hasta el Charco la Olla y la Fuente Jurdana. La humedad lo inunda todo y veo desde el puente la piscina. Ni siquiera el agua de lluvia hace que recobre la gracia de los veranos, cuando se cierran las compuertas y parece un oasis en medio del calor. Es una escena triste y fría. ¿Por qué siendo el mismo río en un sitio me parece que su cauce esta vivo y en el otro muerto?, me pregunto. Sin duda son cosas de la lluvia. Me doy la vuelta y vuelvo a subir al pueblo, que sigue vacío y silencioso. Entro donde el noruego y doy la noticia a los pocos parroquianos: "Llueve". Todos ríen.

2 comentarios:

Alberto dijo...

Hola Enebro, la verdad es que cada pocos días me gusta entrar en tu página para ver si hay algo nuevo, y hoy ha habido suerte. Es agradable saber las novedades que hay por el pueblo y recordar los bonitos lugares que allí tenemos, aunque posiblemente los echemos más de menos los que vivimos fuera.
Según describes tu paseo con lluvia en estas fechas, me recuerda que no hace tantos años pasábamos en el pueblo muchos más las Navidades aunque fuera de vacaciones y la verdad era mucho más agradable que pasarlas en grandes ciudadaes que es bastante más impersonal.
Bueno te deseo para tí y para todos, Feliz Navidad y todo lo mejor para este Nuevo Año.

Por cierto al hablar de lluvia el el pueblo,me ha recordado que tengo alguna foto con mucha agua en el pueblo, por tanto dime donde te la puedo enviar y así la puedes colgar.

Un saludo y hasta pronto

Alberto

Enebro dijo...

Hola Alberto, tienes razón. Antes el pueblo se llenaba por estas fechas y ahora son pocos los que se acercan. Aunque estoy seguro de que llevan su recuerdo siempre consigo. Si quieres enviarme la foto, puedes hacerlo a esta dirección:loscipresesdelasmestasARROBAgmail.com (Ya sabes que lo de escribir así la @ es para evitar el SPAM). Estaré encantado de colgarla.
Felices Fiestas también para ti.